Tenemos de ser transfigurados! — Mons. Silvio José Báez

Orar es subir a una montaña, no físicamente, sino entrando en lo más profundo de nuestro ser en donde encontramos el corazón de luz de Dios.

Se sube a la montaña entrando en nosotros mismos, más allá de sentimientos y razones, más allá del vaivén de la vida diaria llevando en el corazón los grandes problemas del mundo.

Orar es entrar en nosotros mismos, con las manos llenas de rostros y de historias, y dejarnos iluminar, transfigurar por la amorosa y apacible luz de Dios que nos habita el corazón, «en su más profundo centro». Efectivamente, mientras Jesús rezaba su rostro cambió de apariencia.

Divine Mercy Church Anniv Mass 13July19_N3A5472 48376301777_e9da9e1b01_o Jorge Mejia Peralta Flickr
Misa Aniversario Ataque Iglesia Divina Misericordia, Managua, 13 de julio 2019 | Jorge Mejía Peralta / Flickr

Orar transforma: te convierte en lo que contemplas, en lo que escuchas, en lo que amas, llegas a ser como Aquel quien rezas. Dice el Salmo 34: «¡Contemplad el rostro de Dios y quedaréis radiantes!» (Sal 34,6).

¡Cuanta necesidad tenemos de subir al monte en nuestra sociedad, para tener una mirada más amplia sobre la historia, para liberarnos del miedo, para superar la irracionalidad y la ideologización!

¡Cuanta necesidad tenemos de ser, transfigurados!

Monseñor Silvio José Báez, O.C.D.

Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Managua

Leave a Reply

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

You are commenting using your WordPress.com account. Log Out /  Change )

Twitter picture

You are commenting using your Twitter account. Log Out /  Change )

Facebook photo

You are commenting using your Facebook account. Log Out /  Change )

Connecting to %s

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.

Website Powered by WordPress.com.

Up ↑

%d bloggers like this: